Ciertamente vivimos desde hace un mes en un escenario extraño.
Estamos asimilando cómo vivir una cuarentena global impensable para cualquiera de nosotros unas semanas atrás… Una locura.
Nuestro espacio vital se ha visto reducido a los límites de nuestro propio hogar durante casi la totalidad de nuestro tiempo de cada día, de cada semana… Conforme transcurre el tiempo, nos vamos dando cuenta de la importancia de las distintas estancias en nuestros domicilios.
Ahora desayunamos, trabajamos, leemos, escuchamos música, jugamos, vemos las noticias, vamos al cine, cocinamos, comemos, dormimos, cantamos, grabamos vídeos para las RRSS, hacemos quedadas virtuales, etc, etc, etc. Y todo en casa.
Si antes no lo habías pensado, seguramente ahora empiezas a valorar la adecuación de tu hogar para hacerlo todo en su interior. Aprecias cómo cambiar de estancia te hace un poco más llevadero este maldito confinamiento obligado.
Te propongo una cosa. Aprovecha la necesidad de permanecer en casa para mejorar tu hogar.
Si lo piensas bien, le estás haciendo a tu hogar una prueba de fuego que tiene la virtud de darte el tiempo y los datos necesarios. Seguramente te están surgiendo ideas sobre cómo podría ser tu piso, apartamento, casa o chalet. Ampliar o dividir estancias, cambiar la iluminación, redistribuir los usos, modificar instalaciones, aislar mejor al ruido o a la temperaura… las posibilidades son infinitas. Pero tú conoces tus prioridades. Sobre todo ahora.
Desde mi punto vista, es una ocasión pintiparada para la primera etapa del método de esta web. Empezando por el primer paso que debes hacer tú, pasando por el segundo y hasta el sexto, en los que te puedo ayudar. Justo hasta antes de empezar la obra. Ya la harás cuando termine este confinamiento. Pero lo tendrás todo preparado, hasta el más mínimo detalle, si quieres.
Y conseguir tu hogar a medida: ese que te ayuda a superar malditas cuarentenas.
Aquí te dejo una orientación muy visual para hacer de la necesidad, virtud.